Ficción sobre lo que realmente pasó con Romeo y Julieta
( Historia a cuatro manos pensando que el final de la original era...aburrido)
Julieta, ladillada porque todo el mundo le quiere decir qué puede o no puede hacer, decide hacerse la muerta. Ya no ama a Romeo, y le molesta sobremanera que el "pendejo ese" - Julieta Dixit - ande por la vida frotándose las manos con la esperanza de hacerla suya, sólo por el hecho de las dificultades que han tenido para enamorarse.
- "Ya basta" - se dijo frente al espejo mientras comenzaba a urdir la manera de deshacerse de todo el mundo.
Se hizo la muerta, no sin antes garantizar que Romeo supiese que se murió.
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Romeo ya no es el mismo. Anda por la calle malhumorado y cabizbajo. Con esa mezcla extraña de frustración y arrechera por la época en la que le tocó nacer. Al parecer el planeta entero conspira para evitar la union con la única mujer que ha mostrado interés por él.
- " Julieta debe morir, todo es un problema desde que ella apareció " - Se dijo mirando su reflejo tembloroso en las aguas de la fuente del pueblo: Tejía y destejía escenarios en su mente.
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Ambos planes estaban en camino cuando Romeo se entera de la prematura muerte de Julieta. Maldito mensajero. ¿Porque se tenía que haber adelantado?. Tuvo que deshacer al menos quince preparativos por culpa de Julieta.
"Hasta muerta jode" - Pensó mientras se dirigía al carruaje.
Romeo llega a donde está el cuerpo inerme de su "dizque" amada. Simula desesperacion y furia. Le cuesta un poco soltar esa lagrima que necesitaba como punto final del acto. Se le salieron dos pedos pujando por la bendita lágrima, aunque de allí no pasó porque a los presentes les pareció poco prudente taparse la naríz en un momento tan triste.
Romeo termina matándose por amor. Aunque muchos de los presentes sospecharon algo porque la mayoría de los cadáveres no sonríen tres minutos despues de morirse.
-"Es Risus Mortis" -dijo en voz alta el sacerdote, jurando que se la estaba comiendo diciendo dos palabras en latín.
Julieta despierta. Ve a su sonriente amado muerto.
-" Yessssss" - pensó para sus adentros pero su cara la delataba.
Julieta miró a su alrededor. Nota que hay demasiados testigos. Ya Romeo estaba muerto y eso era un alivio, pero ahora ¿como se deshacía del resto?. Decide continuar con la charada, albergando la esperanza de huir en el camino al cementerio.
Al cadaver de al lado se le quitó la sonrisa de repente.
- "Rigor Mortis" - Dijo el sacerdote con su cara de sobrado.
Nadie lo escuchó. El cuento de la resurrección de Julieta estaba mil veces mejor.
Julieta dramáticamente se mata - de nuevo - y se deja caer, sonriente, al lado de el ex-sonriente cadaver de Romeo, quien por su lado ya no puede disimular su arrechera.
Poco a poco fueron pasando los asistentes por la escena del doble suicidio, cada uno soltando la hipocresía de rigor y marchándose antes de que recolectaran el dinero para el doble entierro.
Cuando todos se habían retirado, Romeo se levanta justo en el momento en que Julieta pensaba levantarse, La sonrisa del cadaver de Julieta desapareció mientras la cara de Romeo se acercaba a la patica de su oreja izquierda.
- Trimarda, voy a buscar un arma sólo para garantizar que estas bien muerta - dijo entre dientes.
Luego que Romeo saliera a hurtadillas de la habitación Julieta abrió los ojos y respiró como una desesperada. Todo había salido mal, pero aún tenía la ventaja de que todos creían que estaba muerta. Decide ir a la estación de policía para denunciar a Romeo por fraude y entrar al programa de protección de testigos argumentando que ya no era virgen.
Temía muchísimo por las represalias que tomaría su familia en casos de deshonra forzosa.
Falacias, seguía virgen pero tenía que esconderse.
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Romeo regresó al lugar con una cimitarra tamaño industrial. No le importaba la poca explicación posible para el hecho de que alguien se autodescuartizara por amor. Casi se le cae la quijada cuando vé que el cuerpo de Julieta no esta. Quiere mentar madres pero no sabe si hay gente cerca. Todo había salido mal.
- "Bueno. Aún sigo muerto" - Concluyó.
Romeo no quería saber mas de enamoramientos. Sólo quería una mujer con las tetas grandes y ya se había documentado sobre las maravillas que se podían lograr en las indias occidentales sólo con un espejito. Como pudo salió del edificio. Compró un pasaje en barco no sin antes entrar a un bazar a comprar todos los espejos que tenía en existencia. El dueño del bazar tuvo la osadía de preguntarle si se estaba metiendo a Marico y no tuvo mas remedio que reventarle la jeta de una sola trompada.
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El sacerdote quedó espantado al regresar al habitáculo y descubrir que dos cadáveres habían desaparecido. No sabía que hacer, los extraterrestres no serían inventados hasta despues de mucho tiempo. Decidió simular el entierro de ambos, sólo para que las chismosas del pueblo no pensaran que se los había comido. Ya se habían perdido varios cadáveres y el sacerdote estaba sospechosamente gordito.
Dorángel era su nombre. Fin de la historia.
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No se supo mas nada de Romeo por 420 años. Sólo se esparció el rumor entre los marineros de que se quedó sin espejos en menos de mes y medio. Rumores de hombres, como sabrán los lectores.
Casi lo olvido: Romeo, luego de un tiempo, se dió cuenta que no podía morir.
Por su parte Julieta con su nuevo nombre desapareció de la historia del pueblo. Quería terminar de conocer Europa, tener sexo, olvidar su historia y la de su familia. Tardó poco mas de 40 años en descubrir que - cual castigo del destino - tampoco podía morir.
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Corre el año 2017 y quien antes se llamara Romeo acaba de recibir una invitación de amistad por facebook. La invitación es de una tal Lilia, pero hay algo familiar en ese rostro.
.
- "No puede ser " - Pensó mientras trataba de recordar donde había dejado su antigua cimitarra.
(Esto no pudo ser posible sin la ayuda de Batista y quizas un empujoncito de la sarna de El Kbulla . Ah carajo mas casquilludo)
Julieta, ladillada porque todo el mundo le quiere decir qué puede o no puede hacer, decide hacerse la muerta. Ya no ama a Romeo, y le molesta sobremanera que el "pendejo ese" - Julieta Dixit - ande por la vida frotándose las manos con la esperanza de hacerla suya, sólo por el hecho de las dificultades que han tenido para enamorarse.
- "Ya basta" - se dijo frente al espejo mientras comenzaba a urdir la manera de deshacerse de todo el mundo.
Se hizo la muerta, no sin antes garantizar que Romeo supiese que se murió.
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Romeo ya no es el mismo. Anda por la calle malhumorado y cabizbajo. Con esa mezcla extraña de frustración y arrechera por la época en la que le tocó nacer. Al parecer el planeta entero conspira para evitar la union con la única mujer que ha mostrado interés por él.
- " Julieta debe morir, todo es un problema desde que ella apareció " - Se dijo mirando su reflejo tembloroso en las aguas de la fuente del pueblo: Tejía y destejía escenarios en su mente.
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Ambos planes estaban en camino cuando Romeo se entera de la prematura muerte de Julieta. Maldito mensajero. ¿Porque se tenía que haber adelantado?. Tuvo que deshacer al menos quince preparativos por culpa de Julieta.
"Hasta muerta jode" - Pensó mientras se dirigía al carruaje.
Romeo llega a donde está el cuerpo inerme de su "dizque" amada. Simula desesperacion y furia. Le cuesta un poco soltar esa lagrima que necesitaba como punto final del acto. Se le salieron dos pedos pujando por la bendita lágrima, aunque de allí no pasó porque a los presentes les pareció poco prudente taparse la naríz en un momento tan triste.
Romeo termina matándose por amor. Aunque muchos de los presentes sospecharon algo porque la mayoría de los cadáveres no sonríen tres minutos despues de morirse.
-"Es Risus Mortis" -dijo en voz alta el sacerdote, jurando que se la estaba comiendo diciendo dos palabras en latín.
Julieta despierta. Ve a su sonriente amado muerto.
-" Yessssss" - pensó para sus adentros pero su cara la delataba.
Julieta miró a su alrededor. Nota que hay demasiados testigos. Ya Romeo estaba muerto y eso era un alivio, pero ahora ¿como se deshacía del resto?. Decide continuar con la charada, albergando la esperanza de huir en el camino al cementerio.
Al cadaver de al lado se le quitó la sonrisa de repente.
- "Rigor Mortis" - Dijo el sacerdote con su cara de sobrado.
Nadie lo escuchó. El cuento de la resurrección de Julieta estaba mil veces mejor.
Julieta dramáticamente se mata - de nuevo - y se deja caer, sonriente, al lado de el ex-sonriente cadaver de Romeo, quien por su lado ya no puede disimular su arrechera.
Poco a poco fueron pasando los asistentes por la escena del doble suicidio, cada uno soltando la hipocresía de rigor y marchándose antes de que recolectaran el dinero para el doble entierro.
Cuando todos se habían retirado, Romeo se levanta justo en el momento en que Julieta pensaba levantarse, La sonrisa del cadaver de Julieta desapareció mientras la cara de Romeo se acercaba a la patica de su oreja izquierda.
- Trimarda, voy a buscar un arma sólo para garantizar que estas bien muerta - dijo entre dientes.
Luego que Romeo saliera a hurtadillas de la habitación Julieta abrió los ojos y respiró como una desesperada. Todo había salido mal, pero aún tenía la ventaja de que todos creían que estaba muerta. Decide ir a la estación de policía para denunciar a Romeo por fraude y entrar al programa de protección de testigos argumentando que ya no era virgen.
Temía muchísimo por las represalias que tomaría su familia en casos de deshonra forzosa.
Falacias, seguía virgen pero tenía que esconderse.
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Romeo regresó al lugar con una cimitarra tamaño industrial. No le importaba la poca explicación posible para el hecho de que alguien se autodescuartizara por amor. Casi se le cae la quijada cuando vé que el cuerpo de Julieta no esta. Quiere mentar madres pero no sabe si hay gente cerca. Todo había salido mal.
- "Bueno. Aún sigo muerto" - Concluyó.
Romeo no quería saber mas de enamoramientos. Sólo quería una mujer con las tetas grandes y ya se había documentado sobre las maravillas que se podían lograr en las indias occidentales sólo con un espejito. Como pudo salió del edificio. Compró un pasaje en barco no sin antes entrar a un bazar a comprar todos los espejos que tenía en existencia. El dueño del bazar tuvo la osadía de preguntarle si se estaba metiendo a Marico y no tuvo mas remedio que reventarle la jeta de una sola trompada.
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El sacerdote quedó espantado al regresar al habitáculo y descubrir que dos cadáveres habían desaparecido. No sabía que hacer, los extraterrestres no serían inventados hasta despues de mucho tiempo. Decidió simular el entierro de ambos, sólo para que las chismosas del pueblo no pensaran que se los había comido. Ya se habían perdido varios cadáveres y el sacerdote estaba sospechosamente gordito.
Dorángel era su nombre. Fin de la historia.
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No se supo mas nada de Romeo por 420 años. Sólo se esparció el rumor entre los marineros de que se quedó sin espejos en menos de mes y medio. Rumores de hombres, como sabrán los lectores.
Casi lo olvido: Romeo, luego de un tiempo, se dió cuenta que no podía morir.
Por su parte Julieta con su nuevo nombre desapareció de la historia del pueblo. Quería terminar de conocer Europa, tener sexo, olvidar su historia y la de su familia. Tardó poco mas de 40 años en descubrir que - cual castigo del destino - tampoco podía morir.
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Corre el año 2017 y quien antes se llamara Romeo acaba de recibir una invitación de amistad por facebook. La invitación es de una tal Lilia, pero hay algo familiar en ese rostro.
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- "No puede ser " - Pensó mientras trataba de recordar donde había dejado su antigua cimitarra.
(Esto no pudo ser posible sin la ayuda de Batista y quizas un empujoncito de la sarna de El Kbulla . Ah carajo mas casquilludo)
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